lunes, 25 de marzo de 2013

Anna Karenina

Joe Wright ha realizado una pifia en su adaptación del maravilloso libro de Tolstoi; lo peor, la mala transferencia de los profundos y dramáticos sentimientos de los personajes, que no sólo no eres capaz de captar con la profundidad que mostraría su lectura, sino que se quedan tan lejos de una posible afinidad con el espectador que eres capaz de dormirte o aburrirte siguiéndoles. Se lo pueden creer aquellos que han leído la espectacular obra! Y, para postre, en un alarde de originalidad, muestra todos los fotogramas como si fuera un teatro donde no hubiera otro escenario al que recurrir; sólo queda cambiar los decorados, subiendo y bajando el telón, sin ton ni son. Nada acertada esta película ni su visión; la decepción, ante las esperanzas creadas, es demasiado grande como para poder comprender lo que el director tenía en mente y que quería expresar. Ni la exagerada interpretación de Keira Knightley salva los papeles. Fatal.

No hay comentarios: